jueves, 26 de mayo de 2011

La Seguridad Social. Un modelo sustentable.





La Seguridad Social
Un modelo sustentable



  

Guanajuato, Gto., a 26 de mayo de 2011




                                                                          

Resumen:
Se explica la razón de ser del término sustentable y se plantea la forma en que han operado las pensiones en el mundo. De ahí, se ofrece un nuevo modelo basado en impuestos indirectos y la posibilidad de ofrecer seguridad social a la totalidad de la población.



Abstract:
The term “Sustainable development” and the way that pensions have functioned throughout the world are explained. With that as a starting point, a new model is proposed, based on indirect taxes and the possibility of offering social security to the whole population.



Palabras clave:
Seguridad Social. Pensiones. Servicio médico. Sustentabilidad. Ahorro.


Desarrollo sustentable, crecimiento sostenible, manejo perdurable y otros términos parecidos o similares, han empezado a formar parte del lenguaje común entre quienes se dedican a expresar sus ideas, a manejar criterios y a guiar a los demás.

Sin embargo, hemos podido darnos cuenta que existe una gran falta de información respecto al contenido y significado real del término sostenible, sustentable o perdurable.

¿Qué quiso decir quien lo empezó a manejar? ¿Cuáles eran las expectativas que se tenían? ¿Qué se podía conseguir? ¿Qué factores inciden en la definición?

Esa y muchas otras preguntas surgen al empezar a tratar de definir el tema.

En un plano distinto pero igual de complejo, está la Seguridad Social. Es un saber nuevo, es una disciplina incipiente, que apenas despunta aún cuando su principal clientela sean los adultos en plenitud y su soporte, la juventud toda.

Ahora, al sumar al término Seguridad Social el de sustentable o sostenible, nos adentramos en un universo aún no descubierto, en una realidad que si bien, ahí está para nosotros, aún no hemos tenido la fortuna de hacerla valer.

Para ubicar nuestro quehacer en términos válidos, tomaremos definiciones de organismos internacionales, la Organización Internacional del Trabajo y la Comisión Mundial sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo, así como en las conclusiones a las que hemos logrado arribar.

Por cuestión de método, primero vamos a establecer la definición de sustentable o sostenible. Vamos a tomar lo que ha venido sosteniendo la Comisión Mundial sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo.

Utiliza tres grandes vertientes:

Ecológico; Social, y, Económico.

Al unirlos, va dando los temas que interesan para lograr la sustentabilidad:

Soportable; Viable; y, Equitativo

Así, al sumar los grandes temas y los subtemas, Ecológico, Social y Económico, con los subtemas, Soportable, Viable y Equitativo, se logra que sea sustentable o sostenible, que es la definición que nos interesa.





Satisfacer las necesidades de las generaciones presentes sin comprometer las posibilidades de las del futuro para atender sus propias necesidades.[2]
Meet the needs of the present generation without compromising the ability of future generations to meet their own needs.[1]
Informe de la Comisión Mundial sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo

                                                                 



  
Ahora que ya sabemos lo que es sustentable o sostenible, vamos a entrar a la otra definición que nos ocupa: Seguridad Social.

Primero, vamos a referirnos a la definición que la Organización Internacional del Trabajo, en el Informe de 1991 emitió como propia:
La protección que la sociedad proporciona a sus miembros, mediante una serie de medidas públicas, contra las privaciones económicas y sociales que, de no ser así, ocasionarían la desaparición o una fuerte reducción de los ingreso  por causa de enfermedad, maternidad, accidente de trabajo, o enfermedad laboral, desempleo, invalidez, vejez y muerte; y también la protección en forma de asistencia médica y de ayuda a las familias con hijos.

Ahora bien, el Maestro Gustavo Arce Cano la ha definido como:
“La seguridad social es el instrumento jurídico y económico que establece el estado para abolir la necesidad y garantizar a todo ciudadano el derecho a un ingreso para vivir y a la salud, a través del reparto equitativo de la renta nacional y por medio de prestaciones del seguro social, al que contribuyen los patronos, los obreros y el estado, o alguno de estos,  como subsidios, pensiones y atención facultativa, y de servicios sociales, que otorgan de los impuestos las dependencias de aquél, quedando amparadas contra los riesgos profesionales y sociales, principalmente de las contingencias de la falta o insuficiencia de ganancia para su sostenimiento y el de su familia.

También es necesario asentar que la Ley del Seguro Social en México, en su artículo 2° ha establecido su propia definición:
“La seguridad social tiene por finalidad garantizar el derecho a la salud, la asistencia médica, la protección de los medios de subsistencia y los servicios sociales necesarios para el bienestar individual y colectivo, así como el otorgamiento de una pensión que, en su caso y previo cumplimiento de los requisitos legales, será garantizada por el Estado”.

Ya hemos manejado tres muy importantes definiciones. La de la O.I.T., la del Maestro Arce Cano y la que contiene la Legislación vigente en materia de Seguro Social en México.

Ahora, sabiendo la importancia del foro en que actuamos, elevo una frase que con antelación he usado:
Se debe entender a la Seguridad Social como parte del Derecho Social en los siguientes términos: Derecho Social como la más excelsa creación del hombre en defensa de los derechos de su hermano el hombre, para que todos puedan tener una vida digna, un trabajo decente y una vejez garantizada.

En efecto, la seguridad social es la forma en que el Estado ha de resarcir la capacidad de ganancia de las personas, bien jurídico tutelado, mediante los mecanismos que dispongan las leyes.

En México y el mundo, la seguridad social está casi tal cual la inventó y diseñó Otto Von Bismark, mundialmente reconocido como el Padre de las Pensiones, pues fue el primero que manejó dicho concepto en las leyes emitidas en 1893, 1894 y 1896.

Es decir, la figura jurídica de la jubilación o pensión, que aún no se ponen de acuerdo los grandes tratadistas para establecer la diferencia, es una figura jurídica nueva en el tiempo y que aún carece de una correcta y sana interpretación.

Cuando nacen las pensiones, el universo de pensionados o jubilados era muy reducido y quienes aportaban, era casi ilimitado.

Al tiempo, el promedio de vida cambió, de uno inferior a los 50 años a los que actualmente se manejan en los países mas o menos desarrollados, que todos exceden los 70 años de edad.

Además, el derecho a pensión era casi como un privilegio de los varones, pues eran quienes lograban empleos formales que les permitieran optar por una jubilación.

De pronto, las mujeres irrumpieron en el mundo laboral y empezaron a luchar por el reconocimiento a sus derechos, incluido el de poder jubilarse y lo lograron.

Así, sin mayor preámbulo, de pronto hombres y mujeres alcanzaron los años de servicios establecidos en los distintos sistemas de pensiones y empezaron a obtener su derecho.

Cada vez fueron siendo menos los hijos, el mundo redujo la explosión demográfica, se invirtió el Diagrama de Pareto respecto a los deciles de población de trabajadores y un día, los gobiernos se dieron cuenta que los fondos ya no resultaban suficientes para soportar pensiones. 

Ahí es donde encaja nuestro tema y la propuesta que presento ante Ustedes. Aquí es donde habremos de referirnos a una seguridad social que respete los puntos tratados al inicio.

Si hacemos que el tema de las pensiones se vea desde la óptica de lo Ecológico, Social y Económico, con los subtemas, Soportable, Viable y Equitativo, se logra que sea sustentable.

Si hacemos que el tema de las pensiones se vea desde la óptica de lo Ecológico, Social y Económico, con los subtemas, Soportable, Viable y Equitativo, se logra que sea sustentable.

Entre lo ecológico y lo social, está lo soportable. Entre lo ecológico y lo económico, se ubica lo viable. Si el tema es soportable y viable, ya tenemos un punto de dónde partir.

Lo interesante aparece en los puntos de unión entre lo social y lo económico: Es equitativo. Si además, le sumamos lo ecológico, para llegar al centro de unión de los tres grandes temas, tendremos que es sostenible. 

Y sí. Si logramos juntar los intereses de la parte social con los económicos, será equitativo, que es uno de los valores que se han de buscar en el nuevo esquema de pensiones.

Ya equitativo, soportable y viable, sólo nos falta lograr que sea sostenible y eso, lo conseguimos al unir lo que ya se ha descrito, con la posibilidad de que exista, más que un pilar ecológico, una columna vertebral basada en la solidaridad, que ha sido desde siempre el valor fundamental en la seguridad social.

En efecto, la seguridad social tiene sus cimientos en la forma y términos descritos por Von Bismark y así ha venido siendo. Tibios esfuerzos por cambiar el modelo, no han fructificado.

Se ha tomado el modelo chileno, que ya ha sido abandonado por sus seguidores al no dar resultados.  Otros, que consisten en regalar al pobre unos pesos, tienen tintes electoreros y humillan a quien los recibe.

Lo justo será que todos, por el sólo hecho de ser parte de la sociedad, por participar en la vida en común y colaborar en los esfuerzos que permiten darle valor a la vida, han de tener acceso y derecho a seguridad social.

Se debe olvidar el paradigma de que la pensión o jubilación sólo es para el empleado que tenga relación laboral formal. Ya debe tenerse por superado.

Aquí es donde ya podemos referirnos a la causa y razón de estar ante Ustedes.  La propuesta que, en materia de pensiones o jubilaciones, he venido manejando y que ahora pongo en sus manos.

La forma de lograrlo será tomando en consideración que todos los habitantes del país tienen derechos y éstos, deben ser garantizados constitucionalmente.

Deberán darse las modificaciones, adiciones y transformaciones constitucionales, legales, estructurales y de organización que correspondan.

La propuesta consiste en crear un mecanismo que permita a cada uno, sin tomar en cuenta edad, sexo, credo, religión o ningún motivo de señalamiento, ir tomando el equivalente a dos o tres puntos de IVA que sirva para soportar la futura pensión o jubilación.

De cada operación gravada con IVA que se realiza, vía electrónica y mediante dispositivos de cómputo, podrán hacerse las transferencias que logren soportar esas pensiones.

Obvio, el comprador, al exigir que la operación quede registrada para obtener el beneficio ya descrito, estará obligando al proveedor o vendedor a que informe o notifique a la Secretaría de Hacienda de los importes cobrados por IVA.

Va a incrementarse la recaudación fiscal en, al menos, lo que la propia Secretaría de Hacienda reconoce como evasión y elusión fiscal respecto al Impuesto al Valor Agregado: un 40%

Sin embargo, en estos términos, quien compre mucho a lo largo de una vida, que puede ir desde recién nacido y hasta los sesenta o sesenta y cinco años de edad, según se determine, podrá tener una pensión generosa.

El que nunca compró o que ya tiene la edad o que ya tiene el derecho, de igual modo tendrá una pensión de al menos dos salarios mínimos garantizados por el Estado, pues habrá de existir como columna principal y soporte de las pensiones, la aportación del estado.

La propuesta que está en sus manos implica que personas físicas, personas morales de derecho privado y el Estado, puedan juntar lo que he denominado Impuesto de Aportación de Seguridad Social Indirecto, IASSI por sus siglas.

Es decir, habrá básicamente tres fuentes de aportaciones para seguridad social:

1. Personas físicas

2. Personas morales particulares

3. Personas morales oficiales

Cuando compre un particular, su porcentaje o sus puntos son para él y para ir acumulando para una pensión.

Cuando compre una persona moral de derecho privado, una empresa, servirá para pagar impuestos, en especial, de seguridad social y para garantizar el pago de liquidaciones de trabajadores.

Cuando compre el Estado, cualquiera que sea su forma, se acumulará en una sola cuenta de donde habrá de tomarse lo necesario para cubrir las pensiones que falten.

El interés de todos en lograr que las pensiones o jubilaciones sean una realidad, puede concretarse si hacemos lo que nos corresponde: apoyar a México.

Vale la pena.

Me gustaría conocer su opinión.

José Manuel Gómez Porchini  

La imagen del logotipo del Foro se obtuvo el 26 de mayo de 2011 de la dirección electrónica:

http://goo.gl/I7i5j   



La imagen de SUSTENTABLE se obtuvo el 26 de mayo de 2011 de la dirección electrónica:

http://goo.gl/YHvJx   


No hay comentarios:

Publicar un comentario