miércoles, 31 de diciembre de 2008

De los Impuestos

Ha habido muchos señalamientos en los últimos días, del problema derivado de la falta de cambios estructurales en el País, entre ellos, la reforma fiscal, tanto por parte del Presidente de la República, como de casi todos los que de alguna manera cuentan con presencia en los medios para hacer escuchar su voz.

Se plantea la falta de una reforma fiscal integral como uno de los obstáculos para lograr un decidido crecimiento económico de México.

Cualquiera puede señalar los grandes vicios: evasión, elusión, falta de interés de la ciudadanía en el pago de impuestos, lo difícil que es ser un ciudadano cumplido, las trabas y obstáculos que muchas veces, ni los propios funcionarios de Hacienda comprenden, etc.

Sin embargo, es mi opinión que como todo en la vida, lo más sencillo es lo más elegante, lo más fácil de atender.

Lo digo por lo siguiente: Los impuestos, carga asignada al habitante de cualquier ciudad, población o Estado, son indispensables para que el Gobierno esté en posibilidad de cumplir con sus funciones. Las funciones del Gobierno son proporcionar los medios a la población para que puede alcanzar un mejor nivel de vida en todos los aspectos: seguridad pública, seguridad social, vialidades, medios para fomentar la creación de empleos, etc.

De más de cien millones de mexicanos que somos, sólo los causantes cautivos, es decir, los asalariados, están al corriente en el pago del impuesto sobre la renta. Los demás, esgrimen mil y una deficiencias de las leyes tributarias para cubrir lo menos posible o más aún, para no cubrir impuestos.

¿Por qué? Porque no encuentran aliciente alguno en el pago de sus impuestos. Las obras de infraestructura, las que necesita el País, no se ven. El ciudadano normal no alcanza a percibir los altísimos costos de drenajes profundos, de pago de pensiones, etc. Las obras que si ve, las de relumbrón, las abomina y se queja de la construcción de puentes sobre ríos sin agua, de calles que no van a ningún lado, etc.

Es decir, no existe confianza.

Para obtener esa confianza, debemos modificar de raíz la estructura del pago de impuestos.

La Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, nuestra Constitución, al igual que la mayoría de las Constituciones y leyes impositivas de la generalidad de los países, establecen que los impuestos serán proporcionales, equitativos, impersonales, etc. Lo que se da por sentado.

Sin embargo, creo firmemente que en estos nuevos tiempos, en que contamos con tecnología suficiente para manejar bases de datos antes inimaginables, puede válidamente darse un giro a la Constitución y disposiciones reglamentarias y crear una figura que le permita a la sociedad, vamos, a la población entera, saber con certeza qué sucede con sus impuestos.

La vía para lograrlo será, como lo hago ver en un diverso trabajo, permitir que una parte del impuesto al valor agregado que se cubra, el IVA, sea destinado a una cuenta particular de cada quien.

Lo explico de la siguiente manera: permitir, con la adición constitucional necesaria, que al momento del pago de cualquier artículo gravado con IVA, una parte de dicho impuesto, sea depositado en una cuenta a favor de quien realice la operación, que le permita acceder a ahorro y en última instancia, a obtener prestaciones de seguridad social.

Si cuando Usted, amable lector, adquiera un artículo, de cualquier índole, desliza una tarjeta proporcionada por el propio Gobierno, depositándose un punto o dos de IVA en su favor, obtendrá Usted un ahorro del que podrá disfrutar digamos, cada tres años, hasta en un 25%. Usted, a título de dueño, tendrá interés en ver que en su estado de cuenta, se refleje cada una de sus operaciones cotidianas.

Al momento en que Usted tenga interés en que el proveedor transfiera, vía electrónica, lo que no es difícil en modo alguno, una parte de su pago a su cuenta, estará Usted comprometiendo al propio proveedor a que los demás puntos de IVA los entere al Estado, incrementando así, de manera automática, la recaudación por IVA. Si a valores de 2007 el IVA significó una recaudación total de aproximadamente $600,000,000.00 (seiscientos mil millones de pesos), al momento en que Usted sea el principal interesado en que quede registrada la operación, podrá casi duplicarse el ingreso al Gobierno por IVA, con las consecuencias favorables que a las Arcas Nacionales ello representa.

Sólo imagínese poder enseñar a nuestros hijos, a los nuevos mexicanos, a ahorrar desde menores mediante el pago de impuestos.

Estaríamos cambiando de manera sustancial la educación de México, pues contaríamos con recursos vía ahorro, para impulsar el desarrollo del País, como contaríamos con una población interesada en ver cómo su pago de impuestos realmente genera recursos que el Gobierno tendría que explicar su destino.

Al momento de que el IVA, uno de los pilares de la recaudación de Hacienda, se incremente, podrán sin mayor esfuerzo ni sacrificio fiscal, modificar las demás leyes impositivas a efecto de reducir las tasas del Impuesto Sobre la Renta y Sobre Productos del Trabajo, así como elevar el monto de los que estén exentos de presentar declaraciones mensuales, bimestrales, trimestrales, etc., pues con los esquemas actuales, existen personas físicas y morales que apenas alcanzan a percibir lo suficiente para medio malvivir y sin embargo, deben destinar grandes recursos, en su proporción, al pago de contadores y especialistas en impuestos, así como deben destinar gran parte de su tiempo a realizar innumerables filas ante las ventanillas bancarias a presentar declaraciones con unos pagos mínimos de impuestos, pero con la pérdida de horas-hombre que cuestan al País, más que lo que se supone deben recaudar.

Me gustaría conocer su opinión.

Vale la pena.

José Manuel Gómez Porchini.
Licenciado en Ciencias Jurídicas por la U.A.N.L.
Maestro en Derecho Constitucional y Amparo por la U.A.T.
Socio del Colegio de Abogados de Monterrey, A.C.
Miembro de número de la Academia Mexicana de Derecho del Trabajo y de la Previsión Social.
Catedrático de licenciatura y posgrado en la Universidad del Valle de México, Campus Monterrey.


Comentarios: jmgomezporchini@gmail.com


Monterrey, N.L., a diciembre de 2008.

1 comentario:

  1. hola maestro

    La verdad me agrado mucho la idea
    del ahorro en el IVA y algo que se deberia poner en practica, digo la verdad esta idea nos ayudaria a todos.

    Me retiro maestro espero que este disfrutando este fin de semana hasta luego kuidese.

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